En esta reparación se puede ver claramente una anterior reparación, mal hecha, en la que han inyectado una gran cantidad de resina epoxy en el hueco del taco una vez desprendido este.
El que toque un poco el tema de compuestos sabrá que la resina de poliester ataca al poliestireno expandido de forma química (por la presencia de disolventes), pero el époxy en malas manos, puede generar reacciones parecidas por un exceso de exotermia en su curado. Cuando usamos époxy de laminar en huecos confinados y en gran cantidad, la reacción exotérmica que empieza con la catalización puede llegar a quemar el poliestireno expandido. No lo ataca pues químicamente, pero si físicamente.
Se ve claramente el EPS quemado por la combustión sin llama de la resina.
Además el taco se ha convertido en un bloque móvil, dentro de la caverna.
Proecemos como con un cambio de taco normal, extrayendo el agua que haya podido entrar, en este caso unos 10 cl de agua.
Colocació del EPS y el PVC nuevo
Embutición del taco ya con el cajetín de PVC colocado en el mismo.
Laminado de fibra de vidrio doble de 160 gm/m2
Masillado
Coating
Y finalmente repegado del pad.
Y al agua de nuevo.